El 19 de mayo se celebró la ceremonia de inauguración de los complejos hidroeléctricos “Khudafarin” y “Gizgalasi”, situados en el río Araz, en la frontera entre Irán y Azerbaiyán, con la participación de los presidentes de los dos países, Ibrahim Raisi e Ilham Aliyev.
En la sesión informativa posterior a la ceremonia, Ilham Aliyev dijo que saludaba la posición de Teherán sobre la cuestión Armenia-Azerbaiyán.
“El proceso de delimitación de la frontera entre Armenia y Azerbaiyán está en marcha y estamos viendo los primeros resultados positivos. Esto da esperanzas de que finalmente se llegue a un acuerdo de paz entre Azerbaiyán y Armenia. Acogemos con satisfacción la posición de Irán sobre este tema”, dijo Aliyev.
En cuanto a las relaciones con Irán, Aliyev las calificó como “un factor importante de seguridad regional”.
“Nos apoyamos mutuamente en todas las organizaciones internacionales y continuaremos apoyándonos mutuamente en el futuro. El desarrollo de la región debe estar garantizado por la voluntad de sus habitantes. La interferencia de fuerzas fuera de la región en nuestros asuntos es inaceptable.
Si los líderes de países a miles de kilómetros de distancia quieren lograr ciertos resultados en esta región, que hablen con nosotros. “La intervención innecesaria no ha producido ni producirá ningún resultado”, afirmó Aliyev.
Por su parte, el presidente iraní, Ibrahim Raisi, afirmó que “las cálidas relaciones entre las dos naciones y entre Irán y Azerbaiyán no pueden romperse”.
Según sus palabras, es necesario continuar la cooperación no sólo bilateralmente, sino también en las organizaciones regionales y extraregionales.
Raisi dijo: “La cuestión de Palestina es la primera en el mundo islámico, y no tenemos ninguna duda de que el pueblo de Irán y Azerbaiyán siempre apoya al pueblo de Palestina y Gaza y odia al régimen sionista.
Los enemigos no quieren el progreso de Azerbaiyán e Irán, pero creemos que cualquier progreso en Azerbaiyán es nuestro progreso, y cualquier amenaza en las fronteras de los dos países será una pérdida para ambos países”.
En cuanto al proyecto conjunto de la presa de Gızgalası, Raisi señaló que proporcionará 2.000 millones de metros cúbicos de agua potable y agrícola, 270 gigavatios de electricidad y 40.000 puestos de trabajo.
El presidente iraní subrayó que Irán fue uno de los primeros en reconocer la integridad territorial de Azerbaiyán y está dispuesto a participar en la restauración de la región de Karabaj.
Bakú y Teherán se prometen amistad y hermandad
El 19 de mayo se celebró en la frontera entre Irán y Azerbaiyán la ceremonia de inauguración de los complejos hidroeléctricos de Khudaferin y Gyzgalasy en el río Araz, con la participación de los presidentes de los dos países, Ibrahim Raisi e Ilham Aliyev.
En una sesión informativa después de la ceremonia, Ilham Aliyev dijo que saludaba la posición de Teherán sobre la cuestión de la reconciliación entre Armenia y Azerbaiyán. “El proceso de delimitación de la frontera entre Armenia y Azerbaiyán está en marcha y vemos los primeros resultados positivos. Esto da esperanzas de que finalmente se llegue a un acuerdo de paz entre Azerbaiyán y Armenia. Acogemos con satisfacción la posición de Irán sobre este tema”, dijo Aliyev.
En cuanto a las relaciones con Irán, Aliyev las calificó como “un factor importante en la seguridad regional”.
“Nos apoyamos mutuamente en todas las organizaciones internacionales y seguiremos haciéndolo en el futuro. El desarrollo de la región debe estar garantizado por la voluntad de sus habitantes. La injerencia de fuerzas extrarregionales en nuestros asuntos es inaceptable.
Si los líderes de países a miles de kilómetros de distancia quieren lograr algunos resultados en esta región, que hablen con nosotros. La intervención innecesaria no ha producido ni producirá ningún resultado”, señaló Aliyev.
Por su parte, el presidente iraní, Ibrahim Raisi, afirmó que “las cálidas relaciones entre los dos pueblos y entre Irán y Azerbaiyán “no pueden romperse”.
Según él, es necesario continuar no sólo la cooperación bilateral, sino también en las organizaciones regionales y extrarregionales.
“La cuestión de Palestina es la primera cuestión del mundo islámico, y no tenemos ninguna duda de que el pueblo de Irán y Azerbaiyán siempre apoya al pueblo de Palestina y Gaza y odia al régimen sionista”, dijo Raisi.
“Los enemigos no quieren el progreso de Azerbaiyán e Irán, pero creemos que cualquier progreso en Azerbaiyán es nuestro progreso, y cualquier amenaza en las fronteras de los dos países será una pérdida para ambos países”, señaló.
Respecto al proyecto conjunto de la presa de Gyzgalasy, Raisi señaló que proporcionará 2 mil millones de metros cúbicos de agua potable y agrícola, 270 gigavatios de electricidad y dará empleo a 40 mil personas.
Irán fue uno de los primeros países que reconoció la integridad territorial de Azerbaiyán y está dispuesto a participar en la restauración de la región de Karabaj, destacó el presidente iraní.
