Tras los informes sobre nuevas detenciones de estadounidenses el martes, el Departamento de Estado recomendó encarecidamente a los ciudadanos estadounidenses que no viajaran a Rusia.
Los ciudadanos estadounidenses no deberían viajar a Rusia, dijo el funcionario del Departamento de Estado Matthew Miller en una sesión informativa el martes en respuesta a las preguntas de Turan. “Es peligroso, corre el riesgo de ser arrestado u otras amenazas a su salud y bienestar”, dijo.
Por su parte, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karin Jean-Pierre, dijo que dos ciudadanos estadounidenses, entre ellos un militar, fueron detenidos en Rusia.
Los medios de comunicación estadounidenses reconocieron a uno de los estadounidenses detenidos: el sargento del ejército estadounidense Gordon Black. Según informes, fue arrestado el 2 de mayo acusado de robo después de viajar a Vladivostok sin el consentimiento del gobierno estadounidense.
Black, de 35 años, estuvo destinado en Camp Humphreys en Corea del Sur antes de tomar una licencia el mes pasado antes de ser transferido. Pero en lugar de ir a Texas, se fue de Corea del Sur a Vladivostok por “motivos personales”.
La madre de Black dijo a los periodistas que su hijo fue a Rusia para ver a su novia.
En respuesta a la pregunta de Turan, Miller dijo que cada vez que un ciudadano estadounidense es detenido en el extranjero, los funcionarios consulares intentan brindarle toda la asistencia necesaria y “lo hacemos también en este caso”.
Ayer, las autoridades rusas anunciaron que un estadounidense llamado William Russell Nikam fue detenido hace 10 días y se encuentra en prisión en Moscú acusado de “vandalismo mezquino”.
Los últimos arrestos se produjeron en medio de crecientes tensiones entre los dos países. El Kremlin afirma que los detenidos violaron la ley. Estados Unidos afirma que quiere utilizar a los estadounidenses como medio de influencia política.
