Estados Unidos puso en lista negra a la empresa Sandvine por violaciones de derechos humanos en el extranjero
Estados Unidos dijo el miércoles que agregó a la firma canadiense de inteligencia de redes Sandvine a una “lista negra” de organizaciones y le prohibió hacer negocios con empresas estadounidenses.
La empresa con sede en Ontario ha sido acusada durante mucho tiempo de vender su tecnología de monitoreo web a regímenes autoritarios, incluido Azerbaiyán.
“Sandvine” participó en la violación de los derechos humanos por parte de gobiernos represivos en todo el mundo: en Azerbaiyán, Jordania, Rusia, Turquía, los Emiratos Árabes Unidos y otros países”.
Según la organización de seguimiento Access Now, con sede en Toronto, que monitorea las comunicaciones electrónicas en todo el mundo, Sandvine “desempeñó un papel directo en la represión de las protestas de 2020 por parte del régimen de Alexander Lukashenko en Bielorrusia”.
El Departamento de Estado dijo en un comunicado que Sandvine “proporciona herramientas de censura y monitoreo web masivo para el monitoreo y la censura web masivos, incluido el bloqueo de noticias, el acoso a políticos y activistas de derechos humanos, y la instalación de software espía en los dispositivos electrónicos de críticos y disidentes del gobierno”.
Según empleados actuales y anteriores de Sandvine, el equipo de la empresa se ha utilizado para la censura de Internet en más de diez países: Azerbaiyán, Argelia, Afganistán, Egipto, Eritrea, Jordania, Kuwait, Pakistán, Qatar, Rusia, Sudán, Tailandia, Turquía y Uzbekistán. y otros.
¿Las sanciones de Washington contra una empresa de tecnología indican posibles acciones contra los gobiernos? El representante del Departamento de Estado, Matthew Miller, evitó dar una respuesta específica a la pregunta de Turan. “No tengo otros comentarios”, dijo.
Según un comunicado del Departamento de Estado, las últimas acciones “envían una señal convincente de que Estados Unidos ayudará a responsabilizar a sus creadores por el uso ilegal de tecnologías de espionaje para violar los derechos humanos y acosar a periodistas y activistas”.
